Creo a partir de mi sentir y experiencia, reflejando la realidad que conozco. Mi arte retrata una sociedad corporacrática y heteropatriarcal que nos clasifica y desconecta, una sociedad sin espíritu crítico que maltrata a las mujeres. Cumpliendo con los estereotipos impuestos, olvidé quién era y naufragué. Desde la desesperanza, me reconecté a la vida a través del arte, buscando equilibrio personal y golpeando conciencias. Pinto y esculpo mujeres que trascienden etiquetas y cánones, promoviendo justicia y armonía sin discriminación. Uso materiales sostenibles para que mi obra deje una huella orgánica en el mundo.